La sobrecarga mental provocada por la tensión experimentada todos estos meses ponen de manifiesto la importancia de cuidar, ahora más que nunca, la salud cerebral.
El riesgo de contagio obliga a cumplir una serie de recomendaciones preventivas relacionadas con una mayor higiene o un menor contacto con superficies, objetos o personas.
Dado que la telemedicina ha venido para quedarse, es muy importante conocer cómo podemos aprovechar al máximo todas las ventajas que estas soluciones ofrecen.
El ictus podría prevenirse en un 80% de los casos, por ello, una de las principales vías para controlar su incidencia es la puesta en marcha de hábitos saludables.
Según los datos analizados por Cigna, los españoles solo identifican las molestias en el pecho, dejando de lado otras señales como mareos, dolor en brazo u hombros, o sensación de falta de aire.